lunes, 10 de noviembre de 2008

Narración con el juego de los papelitos:

Caía muy lenta la madrugada del domingo 8 de diciembre de 2002. Carolina Sartirana salió rápido del lugar donde se encontraba, toma aire en la puerta, hizo el intento de volver a entrar, pero después de dar dos pasos hacía adentro, dio media vuelta y corrió en busca de su auto.
Abrió la puerta del auto y se quedo sentada con las manos en el volante y mirando hacía delante. Estaba pálida, se le notaban las ojeras de no haber descansado bien. No creía conveniente manejar a su casa con todo lo que había tomado, pero a la vez no quería quedarse ni un segundo más en ese bar y no podía pedirle a nadie que la lleve.
Afuera empezó a llover. Ella por fin se decidió y colocó la llave en el contacto. Arrancó y salió despacio por la calle que se encontraba hasta la avenida. Se sentía nerviosa y por momentos temblaba y no dejaba de hacer fuerza para controlarse. Aceleró. Buscó la subida al autopista, necesitaba llegar rápido a su hogar.
Afuera llovía, no se veía nada y el auto… el auto giraba para todos, lados, tenía la dirección rota y ella nos reflejos gastados, pero a ella en ese momento eso no le importaba, estaba apurada.
Las luces iluminaban apenas el camino, no veía a más de dos o tres metros delante de ella, culpa de la pared de agua que caía incansable y la separaba de su destino, pero eso no la amedrentaba, ella estaba apurada.
Tenía que llegar ya no le importaba otra cosa. A cada momento estaba más pálida, comenzó a sentir retorcijones y la vista se le nublaba. Sintió un gran alivio cuando estaciono en la puerta de su casa, ni se preocupo por guardar el auto en el garaje. Se sentía más cerca, más segura en su destino y por eso y no por la lluvia corrió a la puerta con la llave preparada para abrirla rápidamente. Entró, escuchó voces que llegaban del televisor de la habitación contigua, pero eso no la preocupó, tenía la lista fija en la puerta del final del pasillo y allí se dirigió. Por un momento encontró su cenit, la cima de su montaña, lo había logrado, había llegada como ella quería. Tomo el picaporte y lo giró y empujó, pero la puerta no cedía. Lo hizo otra vez y tampoco. Desde dentro oyó una voz, afino el oído para oír bien que decía: “ocupado!!!”. Eso la desespero y no aguanto y ahí nomás se cagó. Y pensar que ella solo quería llegar al baño...

Narración Imagen Onírica:

La madre lo mandó a comprar. A él nunca le gusto hacer los mandados matutinos y menos en verano. El calor er asfixiante y él trató de apurarse. Resintió calcinado caminando bajo los insoportables rayos del sol. Y eso lo confundía, porque su madre le hubiese dicho se cuidara del sol a esa hora, y sin embargo allí estaba él, caminando una vez más, como ayer, como cada mañana que recordaba.

Eran sólo tres cuadras, pero a él le molestaba que interrumpieran su tranquilidad, su momento de paz. Pensaba que ir a comprar peras a la verdulería era una acto menos a quedarse en su habitación para saber que pasaba en la guerra. Esa guerra tremenda que tanto le gustaba apreciar, aunque él ya sabía quien iba a ganar. Pero la distracción…La distracción le molestaba. Cuando se sentía inspirado tenía que llevar sus pensamientos a la acción, a un hecho real del cual él pueda disfrutar.

No había querido que su madre le haga una lista con las cosas para comprar, él confiaba en su memoria y se sentía orgulloso de ella. Muchas veces había podido dar muestras de ello con sus familiares, recordando hechos menores de situaciones importantes o contando detalladamente escenas efímeras de su vida, las cuales parecía como si les estuviese viendo. Además eran sólo tres cosas: Naranjas, Manzanas y Peras. Era la época de las peras y el mejor momento para comerlas. Desde hacía unas semanas la madre había estado comprando peras y era la fruta que más rápido desaparecía de la heladera.

Una vez ya en la verdulería trató de mirar en los cajones buscando a ver en cuales estaba la mejor fruta. Cruzó la cortina que cubría la puerta y se encontró solo en la verdulería. Tuvo varios pensamientos y le subió la adrenalina. Tenía sueños juveniles de experiencias prohibidas como robar unas manzanas y salir corriendo sin que nadie se diese cuenta, pero sabía que en su casa nunca lo hubiesen perdonado. Al otro lado de la habitación había una puerta entre abierta. Se acercó lentamente y llamó con un tímido “hola” a ver si alguien le respondía.

-Si Ya va- Escucho.

Apareció una señora retacona con una pollera larga hasta los tobillos y de camisa arrugada, se estaba sudando y se ponía el delantal rápidamente.

- ¿Si querido?, ¿Qué Necesitas?

Hizo memoria y contestó igual que se lo había dicho su madre, uno por uno. Primero un kilo de manzanas, que no estuviesen arenosas, porque al padre no les gustaban así. Luego un kilo de naranjas para jugo, no de las de ombligo y que estuviesen lindas. Y por ultimo, como la frutilla del postre, le pidió a la verdulera un kilo de peras, de las lindas, que estén bien amarillas.

- No mi amor, decile a tu mamá que no tengo más peras.

“¿Cómo no tiene peras?” pensó. El pulso se le aceleró. “¿Nada de peras?” pregunto con preocupación e incrédulo. No entendía como la verdulería no tenía fruta. ¿Si ahí no había frutas entonces dónde? Tenía pensamientos confusos y la cabeza le daba vueltas. Toda su familia comía peras y no le iba a llevar peras para comer…

“¿Algo más querido?”, le pregunto la verdulera como sacándolo del estado de ensueño en el que se encontraba. Abrió la boca y movió la cabeza negativamente, pero no llegó a salir ni un susurro de entre sus labios. Pagó lo demás y salió despacio por al puerta, ni siquiera se fijo en el vuelto como siempre hacía. Tampoco se apuró por volver, ya no tenía apuro, no tenía porque correr. El sol ya no lo calentaba y el tiempo parecía haberse estancado en un instante de sufrimiento eterno. Y él caminaba pensando en que no tenía peras.

Fin

martes, 14 de octubre de 2008

Diario sobre la cronica Final

Me llevó mucho tiempo poder buscar el tema exacto para la escritura de la crónica. Si bien tenía una idea muy por arriba, creía que era muy vaga, que no había nada solido de donde asirme. Después de la clase donde le consulte a la profesora marque o centre el tema, ya había buscado algo de material y más la entrevista que ya tenía era suficiente para hablar sobre los ideales del rock en sus comienzos allá por fines de los 60'.
Sin embargo sentía que no podía empezar a hablar sobre eso solamente, necesitaba un hecho que me lleve a pensar, algo con que relacionarlo, y salió luego de mi experiencia del sábado, tratar de cruzarlo con el recital de Motley crue y mostrar ambas partes del rock. Lo que fue y querían que fuera y lo que realmente es.
No estoy seguro de que me haya salido como yo quería, pero ahí esta! que la disfruten

Cronica Final

Vida, Agonía y Muerte del rock en un recital

Son pasadas las nueve menos cuarto de la noche, Rata Blanca en el escenario está por despedirse con su clásico La leyenda del Hada y el Mago, y en el cielo las nubes agolpadas como la gente en el campo del Estadio Ciudad de Buenos Aires saltado y cantando, cuando caen las primeras gotas. Unas pocas dejan entrever que nadie saldría de allí seco. El viento y el agua le dan un gran escenario final al show de Rata Blanca. La banda se despide contenta por su actuación, yo mientras miro hacía atrás y miro como la gente a pesar de la lluvia se pega una a otra y tratan de llegar lo más adelante posible para el show principal de esta fecha del festival Pepsi Music que es Mötley Crüe. Los norteamericanos son frase “Sexo, drogas y rock and roll” en persona. Son bien conocidas las andanzas de su baterista Tommy Lee con Pamela Anderson y su famoso video erótico. Entonces vuelvo a mirar al público, la mayoría no pasa los 30 años y a grandes rasgos los más grandes no llegan a los 40, se los ve fascinados a la espera de los que son, quizá sus ídolos, músicos que representan una clara distorsión de lo que es el rock, gente apegada al rock como mercancía, de una banda como forma de empresa que lo único que les genera es dinero y fama. Y el público que los ve responde a eso, compra esa idea, en este campo del estadio Ciudad de Buenos Aires no hay ideales ni interés de querer cambiar las cosas, ¿Pero no fue esa la razón por la que nació el rock?

Nace el rock en Argentina

Según sus propios creadores la música de rock en Argentina surge en argentina como una forma de diferente de expresión, revolucionaria a lo que era la época. Surge en dictadura, en la llamada dictadura blanda de Onganía, quizás blanda porque no tenía un plan sistemático de tortura y desaparición de personas, sin embargo las restricciones a las libertades universales de los habitantes del país estaban igualmente cortadas o mejor dicho seccionadas. Como dice “el flaco” Spinetta “Te llevaban por ser negro y tener el pelo largo”, hablando del gran criterio de selección que tenía la policía durante la dictadura.
Eran los años ’60, la música más descabellada que se podía escuchar eran Elvis Presley, por sus movimientos de pelvis y los Beatles, quienes irrumpieron en el mundo mostrando que la música podía llevar un mensaje claro en sus letras y ser trasmitidos. Esas eran las mayores influencias de los músicos en argentina cuando a fines de la década aparecen bandas como Los Gatos, Almendra, Manal y Vox Dei.
Recuerdo lo que me había dicho Willy Quiroga, cuando lo entreviste para que me cuente como era y que significaba el rock en sus comienzos:

-- El rock es una forma de vida, una forma de pensar, es una filosofía, es una forma de estar parado frente a la vida y con respecto a los demás.

Esta frase representaba tanto a músicos como al público, todos eran parte importante de lo mismo, de una búsqueda de ser diferentes y como dijo el periodista Sergio Marchi de respetar y hacer respetar el derecho a la diferencia. Pero esa diferencia no era querer separarse de la sociedad establecida, sino tratar de cambiarla. El hecho de que los iniciadores del rock argento vivieran en una dictadura militar los incentivó a la búsqueda de la libertad. Así en el primer disco de Pappos Blues, el Gran Norberto Napolitano incluía la canción Adonde está la libertad una pregunta filosófica e impaciente en busca de lo más preciado.
En ese momento existía un intangible que unía a todas las bandas bajo un ala, una búsqueda, un proyecto. “Era una forma de expresión, de expresarte, que en ese momento te llevaba a hacerlo de una forma diferente. Y cuando nos quisimos dar cuenta habíamos nucleado alrededor nuestro un montón de gente, que no eran solo músicos, sino asiduos escuchas, que se convirtieron en fans de esa forma de expresió”, me decía Willy.

¿Querías rock? Comé Rock

Las luces del estadio se apagan, la gente empieza a gritar desaforadamente y una multitud empuja para hacerse un lugar lo más adelante posible. La lluvia es ardua y no cesa, sin embargo no trae mayores problemas a la banda que sale a escena y con los primeros acordes de Kickstart My Heart hace delirara al publico argentina por primera vez. El público se golpea, hace pogo, y se descontrola, muchos de ellos están producidos y vestidos como en los ochentas y algunos tratan de emular a sus artistas preferidos maquillándose la cara. La banda suena muy bien, tiene un sonido muy nítido y a la vez crudo, que no se pierde a pesar de la pared de agua que divide a la gente de los parlantes. La fuerza de la banda es demoledora, por momentos un cree que la puede sentir. Vince Nail trasmite muchísimas sensaciones, canta como hace años no lo hacía y el que conoce su historia no puede creer que sea la misma persona que estuvo a punto de morir de sobredosis. Nikky Sixx con casi 60 años se mueve poco, sin embargo su guitarra es lo que mejor suena de la banda, parece haber vuelto con una maquina a los ’80, tiene la galera puesta y un saco largo al tono, nada desentona en la banda y el publico se muestra realmente contento. Pasan Wild Side y Shoot At the Devil y Vince comenta que vana tocar un tema de su ultimo disco, el que le da nombre al mismo Saint Of Los angeles. La banda sacó un disco este año después de mucho tiempo. Claro que no son los que eran en los ochentas, ni en sus composiciones ni en las ventas de sus discos, muchos podrían decir que su tiempo pasó, pero ¿el rock tiene fecha de vencimiento?

Un final esperado

“Todo lo que el hombre toca lo corrompe - me dijo Willy – Por más buenos ideales que comience todo termina corrompiéndose y alguien termina tratando de sacar una ventaja”. Y eso paso con el rock el mercado, termino corrompiendo los ideales que en un principio se había trazado. Ya a mediados de los ’70 algunas productoras vendían como “rock” bandas de música popular, tratando de sacar más rédito de un sector de la sociedad que estaba creciendo. En la misma década el rock comienza a hacer recitales masivos, convocando mucha gente y ya instalado como, pero no todavía aceptado. Las rastas policiales del Proceso de reorganización militar que comenzó en el año ’76 iban a ser duras, algunos recitales eran cortados en la mitad y otros directamente no se podían realizar. El rock no estuvo ajeno a la “política” de destrucción de la cultura por parte de la dictadura y muchos músicos y discos fueron prohibidos. Sin embargo será esta misma dictadura quien revitalice la vida del rock en argentina. En el año 82, luego de comenzada la guerra con Malvinas, se decreta que no se podía trasmitir más música en ingles en las emisoras de radiodifusión. Esto represento un gran empujon a los músicos argentina, hizo que mucha gente los conosca y se popularizaran. Quizá fue aquí cuando el rock se termino de corromper.
Los años ’80 en la argentina representan un momento de crecimiento espectacular para el rock local. La aparición de nuevas bandas muy masivas y la incursión de los fundadores del rock en nuevos proyectos hizo que comience una nueva época. Si bien en muchos caso las bandas nuevas tenían el espíritu idealista que se trataba de dar a principio de los ’70, como Sumo o Patricio Rey y sus redonditos de Ricota, el mercado comenzó a apoderarse cada vez más de la música. Muchas multinacionales se establecen en el país y comienzan a contratar artistas, algunos contratados, pero la mayoría nuevos. Y el rock, como ya había pasado en el resto del mundo, se convierte en un negocio.
En una ultima reflexión Willy me dijo: “Hoy en día parece que la idea es parecerse a alguien más, se quieren mimetizar con su ídolo, cuando en realidad la idea era no parecerse a nadie, era ser diferente, tener una forma muy particular de expresarse. Hoy las cosas han cambiado, los chicos se compran una guitarra y ya están pensando en la ropa que vana usar y en flog… Nosotros no teníamos ni fotos”.

Los Decepcionados del Rock

Los últimos dos temas son Dr. Feelgood y Girls Girls Girls, los mayores éxitos de la banda, la adrenalina sigue corriendo por las venas y la gente les canta “otra! Otra!”, sin enbargo los músicos se van y todos sabemos que no van a volver. Camino hacía la puerta de salida completamente mojado por la lluvia, Mötley Crüe acaba de terminar, fue un show intenso, lleno de clásicos para deleite de sus fans y con un sonido soberbio, no hay nadie decepcionado. Sin embargo, ya en Avenida Libertador, en la parada de colectivo 130 para volver a mi casa, cuatro pibes que hacen la cola se lamentan de que llueva, el agua les corrió el maquillaje y les arruino la permanente, ya no se parecen a Vinve Nail y Nikky Sixx en los ochenta, son tan solo 4 pibes mojados que acaban de salir de un recital y eso parece decepcionarlos.

Reflexión sobre el Genero

-¿Cuál es su definición de Cónica periodística?
- Siempre lo entendí como un hecho contado en forma cronología, siguiendo la línea del tiempo de los acontecimientos. Sin embargo esa respuesta es muy de manual. Creo que la crónica puede ser mucho más que eso, ya que posee una función explicativa de los hechos, relevamientos históricos, antecedentes, declaraciones directas o indirectas levantadas de un trabajo de campo y puede contener preguntas que le surjan al periodista teniendo en cuenta el material que maneja.
- ¿Cuál Cree que es su finalidad?
- Creo que como toda herramienta periodística la finalidad principal es informar, pero a la vez tiene un función aclaradora, explicativa y desarrolladora de los hechos. Para el lector una crónica es mucho más útil que la simple noticia, ya que en su faceta investigativa no tiene que estar atada a la caprichosa actualidad, puede presentar hechos pasados, de forma innovadora a la visión que se tenía, y eso una noticia no lo puede dar. Y para el escritor también tiene otras finalidades. Como periodista quizá el mejor trabajo que se pueda realizar es una beuna crónica en base a una investigación. Además permite a los escritores abrir el abanico de posibilidades dialécticas, estilísticas, a las que se usan habitualmente en el periodismo gráfico.
- ¿Qué limites –éticos, metodológicos— existen a la hora de investigar una historia para contarla?
- En cuanto a los límites éticos no existen. Por lo menos objetivamente. Existen en cuanto uno se ponga esos límites y eso va a depender de su propia ética. En cada uno queda en ir en contra de su propia ética por una buena crónica. En cuanto a los metodológicos tampoco existen. Uno no puede quedarse encerrado a una sola concepción de lo que es una crónica, y desechar otras formas de escribirla, menos teniendo en cuanta las posibilidades que una crónmica brinda.

Notas de Lector

Para escribir las notas de lector me fije en lo que me llamaban más la atención delas crónicas que elegí. En si no habla demasiado en como están escritas, porque yo no me fijo en eso, en cambió si resalto el trabajo de campo hecho y ciertas capacidades que me parecen de valorar a la hora de escribir una crónica porque no todos los escritores lo hacen de esa forma. En si también me fije mucho pata que medio estaban escritos y de donde eran egresados los cronistas, sin embargo guarde para mi las opiniones personales sobre los mismos

Notas de Lector de La Argentina Crónica:

El caso Pobrete. La Fuerza del cariño.
Es una de las mejores crónicas del libro para mí. Utiliza muy bien el recurso de volver en el tiempo, mientras que cuenta un hecho se remonta a la historia para poder explicarlo y contextualizarlo. Posee mucha información histórica y se nota un fuerte trabajo de campo con entrevista a los familiares de Jose Poblete para obtener los datos que la dejan contextualizar perfectamente el suceso que motiva la crónica.

En campaña Con Duhalde y Ortega
Es una crónica corta con respecto a la mayoría de las que aparecen en el libro. Tiene un lenguaje por momentos vulgar y expresiones gravemente discriminatorias. En si busca provocar más que contar cronológicamente un suceso. Cuenta la trastienda de una gira de campaña electora y trata de mostrar el lado fuera de la política de las personas entrevistadas. No tiene un hilo claro y tampoco un buen cierre.

La política en los boxes
Es similar a “En campaña con Duhalde y Ortega” en el tema en general, que es la política, y en tratar de mostrarla desde otro lado. Para entender esta crónica creo que hay que estar muy atento a que clase de público fue escrito, porque el hecho de que haya sido escrita para la revista Playboy no es menor. Usa un lenguaje muy coloquial, trata de sonar como a “pibe de barrio” y hasta se da el lujo de hacer chistes.

No Tan Buenos Aires
La crónica que más me gusto. El trabajo de campo es muy importante y se nota que llevó mucho tiempo. Tiene muchos testimonios, y los usa para tratar de dar todas las miradas posibles sobre el mismo tema y que el lector saque sus propias conclusiones. Pero tiene un gran problema, el autor deja entrever la poca importancia que le daría si el polo de duck sud no estuviese cerca de la ciudad autónoma de Buenos Aires. Está todo el tiempo preocupado por lo que le pueda pasar a Buenos Aires y nunca se fija que la misma explosión podría causar un daño mucho mayor a gran parte de la zona sur del conurbano bonaerense.